Connect with us

Opinión

Waldo Wolff: “Creo que el asesinato de Nisman fue obra de un servicio local”

Published

on

El diputado por Cambiemos y la periodista Delia Sisro acaban de publicar “Asesinaron al fiscal Nisman. Yo fui testigo”, un libro que va desde lo testimonial y biográfico a lo investigativo y que respalda la tesis de la Justicia sobre el homicidio del fiscal que denunció a la expresidenta Cristina Kirchner por el presunto encubrimiento del atentado contra la mutual judía

El diputado por Cambiemos Waldo Wolff fue la última persona en recibir del fiscal de la UFI AMIA, Alberto Nisman, una foto por WhatsApp que recreaba su compromiso con la investigación que lo había llevado -cuatro días antes- a imputar a la expresidenta Cristina Kirchner por el presunto encubrimiento del atentado contra la mutual judía.

Wolff recibió la imagen del improvisado escritorio de trabajo del fiscal junto con resaltadores y las impresiones de la fundamentación de la denuncia, desparramadas en el comedor de su departamento en Puerto Madero horas antes de que Nisman fuera asesinado en enero de 2015, según la pesquisa de la justicia federal

Antes de ese hecho todavía impune, el entonces vicepresidente de la DAIA alzaba su voz “contra el pacto de impunidad sellado con Irán” que el fiscal había denunciado y se aprestaba a fundamentar ante una comisión del Congreso.

El diputado Waldo Wolff y la periodista Delia Sisro

El diputado Waldo Wolff y la periodista Delia Sisro

Tras la muerte de Alberto Nisman, Wolff continuó denunciando las irregularidades institucionales que rodearon la investigación.

Asesinaron al fiscal Nisman. Yo fui testigo“, es el flamante libro en el que documenta -junto a la periodista Delia Sisro- cada uno de los hechos objetivos, pericias y circunstancias políticas a través de las cuales se intentó cimentar la hipótesis de un suicidio. Tras compendiar y traducir el expediente que investiga su muerte, los autores respaldan la tesis de la Justicia: “Nisman murió por lo que él sabía y estaba dispuesto a ventilar“, afirman Wolff y Sisro en una entrevista con Infobae.

Y anticipan parte de esa escurridiza verdad real desmenuzada en el capítulo central sobre la muerte del fiscal que la impericia inicial de la justicia, las deformaciones de medios adictos y la voluntad política se empeñaron en esmerilar.

#EsPruebaNoEsRelato“, escriben frente a cada uno de los hechos del expediente que se encargan de iluminar para que los lectores elaboren sus propias conclusiones.

Portada del libro centrado en la investigación sobre la muerte del fiscal Nisman

Portada del libro centrado en la investigación sobre la muerte del fiscal Nisman

 -Ya desde el título, “Asesinaron al fiscal Nisman. Yo fui testigo”, asoma lo testimonial. ¿De qué fuiste testigo?

-Wolff: Fui testigo de una época en la que hablar era difícil. Nos perseguían, nos atormentaban, nos hostigaban, nos amenazaban. Y además vi cómo se mató a un fiscal desde las pruebas, porque no lo digo yo, lo dice en su fallo el juez (Julián) Ercolini: “Se ha probado con los elementos que da el Código Procesal Penal de la Nación que la muerte del fiscal Nisman no obedeció a un suicidio y que habrían participado terceras personas en forma dolosa”.

Más allá de lo que dice el juez, lo que también está probado es que todo el aparato kirchnerista asesinaba el concepto de un fiscal con lo que esto representa. Porque se metían en su vida privada; porque la expresidente por cadena nacional decía que tenía una relación íntima con Lagomarsino, mintiendo y no importándole que lo escucharan sus hijas; porque mientras gran parte de un país salía a la calle en silencio en la Marcha de los Paraguas, ella decía: “Nosotros nos quedamos con el festejo y les regalamos el silencio“. Eso también es asesinar a un fiscal. Eso también es ir por las instituciones. Eso es ir por todo como ella bien lo dijo y se hacía cargo de eso.

-En el libro, que va desde lo testimonial y biográfico a lo investigativo, hay un capítulo central que muestra cómo murió Nisman. ¿Cómo abordaron esas pericias?

Delia Sisro: Por empezar, la verdad es soberana siempre. Íbamos viendo las fotos, leyendo el expediente, viendo los peritajes y los hechos hablaban por sí solos. Entonces decidimos centrarnos en lo estrictamente objetivo. Poníamos algo y decíamos: “No, esto es adjetivación” y lo quitábamos, porque queríamos centrarnos en los hechos para que la gente pudiera sacar sus propias conclusiones. Y los hechos eran tan abrumadores que alcanzaban con enumerarlos.

El desenlace fatal según la reconstrucción que aportó la querella

El desenlace fatal según la reconstrucción que aportó la querella

-¿Quiénes fueron las fuentes?

DS: No podríamos hablar de una sola persona, porque fueron muchas, además del expediente. Hubo muchísima lectura y consultas a gente vinculada a la causa y otra que no. Aspiramos a que todo el mundo pudiera entender para no quedarse con un relato masticado. Por eso, con un lenguaje sencillo, explicamos desde lo que es un espasmo cadavérico hasta lo que son los “ojos de mapache” para la medicina forense y cómo uno y otro estado no pueden coexistir; una de las tantas contradicciones que al ser pasadas por alto instalaban la hipótesis del suicidio.

– De todo aquello que investigaron, ¿qué fue lo que más les llamó la atención por su incongruencia?

-WW: Muchos se preguntaban por qué la primera pericia dio de una manera y la segunda de otra. Y es importante aclarar que la primera pericia se hizo con mucha menos información de la que había. La segunda fue complementaria e incluyó muchos más elementos, como por ejemplo, la remera del fiscal, que una perito cortó. Hay una premisa básica en las autopsias de que al muerto se lo debe llevar vestido a la morgue. En esa segunda pericia se analiza también la famosa alfombrita que estaba debajo de sus pies estirada como si la hubiesen puesto, con gotas verticales que está probado que han caído de diferentes alturas. Las cuestiones físicas que indicaron que no se trató de un suicidio sino que participaron terceras personas fueron precisamente las manchas de sangre en el baño, la posición del arma, la posición final del cuerpo y el modo de absorción de la sangre en la ropa de Nisman. En el caso de las manchas en la remera del lado izquierdo, cuando la bala entró por la sien derecha, los peritos que analizaron las fotos no logran explicarlas si no es con la participación de terceras personas tal como determinó Ercolini.

-Fallo que ratificó la Cámara también…

-DS: La ausencia de rastros de pólvora en sus manos fue clave, porque para poder descubrir si él se había disparado con el arma, el plomo, el antimonio y el bario debían estar fusionados en la mano. Se hicieron tres pruebas, dos en Salta y una en La Plata, con lapsos diversos de tiempo para ver la permanencia de esos tres elementos en la piel. En todas dio negativo; una prueba más que contundente. También hay un montón de cuestiones simbólicas que en realidad fueron la parte más siniestra de la historia.  A lo de la remera hay que agregar que además la pusieron en una bolsa de supermercado, adentro de un sobre de papel. Del mismo modo que foliaron en lápiz negro. Todos estos hechos fueron siniestros.

WW: Agrego una más: la teoría de que él se mató frente al espejo, que está basada en una marca de su mano. Está probado y están las fotos en el libro de que si fue un suicidio frente al espejo, no se puede explicar cómo todo el lado derecho del baño esté inmaculado, cuando la bala no tuvo orificio de salida y la cabeza es un lugar altamente vascularizado.

Reconstrucción del asesinato del fiscal aportada por la querella

Reconstrucción del asesinato del fiscal aportada por la querella

-¿Por qué se insiste sobre la hipótesis del suicidio?

WW: Es una pregunta que tenés que hacer a aquellos que defienden eso. No vamos a invertir demasiado tiempo en ver por qué hay gente que incluso está criticando el libro antes de leer las pruebas. Es un tema que tiene que ver, a mi entender, con una enfermedad que llevamos como sociedad hace muchos años. Hay un autor que decía: “Es mucho más fácil defender una mentira que reconocer que te han engañado”. Nisman no tenía rastros de pólvora y sin embargo al disparar el arma los deja. Ese es uno de los cuadros de esta película que es indiscutible.

DS: Hubo una construcción. La idea de que él supuestamente se mató frente al espejo fue pensada, fue construida. Todo cerraba. La gente que se suicida frente al espejo suele ser la gente que se mata con armas blancas. Por muchísimas razones que explicamos en el libro esto no era posible. Pero si lo contás rapidito y decís: “La denuncia era un mamarracho, entonces se deprimió y se mató”, rápidamente el relato funciona.

-Subrayan las desprolijidades iniciales de la investigación y también refutan las distorsiones instaladas por los medios, intencionadas o no. ¿Cuál de esas dos variables fue más reprochable?

DS: Todo es objetable y todo indigna. Mientras corroborábamos los hechos, la primera palabra que asomaba era dolor. Básicamente porque la muerte de un fiscal es un magnicidio. No puede ser siquiera investigada como cualquier otra muerte, aunque todas deban ser investigadas rigurosamente. La impericia, la negligencia, el descuido, el abandono tienen explicaciones diferentes. Algunas fueron por ignorancia; hubo gente que no sabía hacer bien su tarea, lo cual también es grave. Pero el tema es que ese cocktail empeoró el caso. No hemos tenido un día de duelo por la muerte de un fiscal. Inclusive creyendo que se suicidó, es una muerte.

El ex secretario de Seguridad, Sergio Berni, y la fiscal Viviana Fein

El ex secretario de Seguridad, Sergio Berni, y la fiscal Viviana Fein

-También señalan mentiras y les atribuyen intencionalidad política…

WW: Los medios mintieron a sabiendas. Página 12 sacó un título diciendo que Nisman tenía 1,76 gramos de alcohol en el estómago y que por eso estaba borracho. Investigando descubrimos que 1,76 gramos de alcohol en el estómago no tiene nada que ver con alcohol en sangre. En realidad, eso era etanol. La expresidente por cadena nacional dijo que Nisman llegó a cambiar el pasaje [estando de vacaciones en Europa] para volver el 12 de enero de 2015 [por una supuesta gestión de Jaime Stiusso]. Mintieron a sabiendas y utilizaron el aparato del Estado.

Acá tenés a la expresidente de la Nación sentada, el día de la apertura de sesiones ordinarias de la Cámara de Diputados, en el sillón del presidente del honorable Congreso de la Nación Argentina, escrachando por cadena nacional. Y los medios que las seguían aplaudían eso. Acá la señora expresidente dijo vestidita de blanco por cadena nacional que Nisman tenía una relación íntima con Lagomarsino…

Nosotros no nos metemos en la vida personal de nadie, porque incluso en las guerras hay que tener la honorabilidad de respetar al enemigo cuando uno está combatiendo y se permite incluso enterrarlo con honores. Acá, esta señora salió a decir que festejaba mientras muchos estábamos de duelo. Un ex Jefe de gabinete, con el cuerpo todavía caliente del fiscal, amenazó con meter presa a la madre y criticó el duelo judío. Le explicaba a la sociedad por Twitter cómo los judíos hacíamos duelo. La verdad es que lo que vivimos como ciudadanos fue sencillamente asqueroso. No tiene otra calificación.

– ¿Por qué lo mataron a Nisman? ¿Y cuál fue el vínculo que usted tenía con él?

WW: No era amigo de Nisman, y siempre lo digo porque no hago apología de las relaciones. Tenía trato profesional con él porque yo era vicepresidente de la DAIA, querellante en la causa AMIA que él investigaba. Nunca me vi por afuera de cuestiones que tuvieran que ver con el trabajo, razón por la cual para mí esto [sus sucesivos reclamos públicos en la causa Nisman] fue una experiencia cívica. Lo hice por hartazgo, lo hice porque fueron por él y terminaron viniendo por mí. Después se metieron con mi familia, me amenazaron, me amenazó un juez federal, me acusaron de ser agente del Mossad y de traición a la patria por representar intereses extranjeros y corporaciones económicas.

Fueron los mismos argumentos con los que los nazis persiguieron a mis abuelos en Alemania. La diferencia es que yo no me escapo de mi país. Yo vengo a luchar para que no se persiga nunca más a nadie desde el poder. ¿Por qué mataron a Nisman? Yo no lo pongo en el libro. Lo que yo creo—y esto sí es una construcción política, porque quiero que cada uno saque sus propias conclusiones—, es porque iba a hablar. Él el lunes iba a sentar a todos los servicios de inteligencia frente a la Justicia. Iban a ver sus teléfonos, sus cuentas, sus viajes, sus declaraciones juradas. Hacé un paralelismo con la causa de los cuadernos: tenemos más de veinte empresarios presos y esto ha revolucionado a la política argentina. Imaginate sentando a la SIDE de aquel momento, que tenía viajes a Venezuela y a Irán, connivencia con Esteche, con D’Elia, con lo peor que tuvimos como país en los años que nos tocó vivir esta injerencia, y con la venta y la cesión del valor más sagrado que es la justicia cedida al que está acusado de haber puesto una bomba en Argentina y matado 85 personas.

El ex fiscal Alberto Nisman (Reuters)

El ex fiscal Alberto Nisman (Reuters)

-¿La vieron como un disparo al avispero?

WW: No, en el caso de Nisman, era un disparo a una abeja, pero iba a tener que presentarse el avispero, siguiendo esa comparación, y se iba a ver todo lo que había debajo, de lo que ellos terminaron criticando y de quiénes fueron socios. No lo conozco, pero Stiuso dio testimonio de que él recibió órdenes en el 2012 de dejar de investigar a Irán. Y nadie lo denunció por falso testimonio, así que para mí es verdad porque así figura en el expediente. Y ninguno de los acusados, incluso la expresidente, cuando él dijo que recibió órdenes de ella, se presentó a denunciarlo por falso testimonio.

DS: En mi caso no tengo una hipótesis tan distinta. Creo que Nisman, a quien nunca conocí  sino que reconstruí su imagen a través de muchos relatos, tenía dos cosas que son siempre muy peligrosas: información y no tenía miedo. Eso siempre es una combinación explosiva y lo terminaron explotando, literalmente.

Héctor Timerman firmando el Memorándum con Irán

Héctor Timerman firmando el Memorándum con Irán

-El capítulo dedicado a la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán se centra en la figura de Timerman. ¿Por qué creen que Timerman, siendo judío, se prestó a semejante acuerdo de cesión de soberanía y de impunidad?

WW: Nunca me metí con la condición de judío de  (Héctor) Timerman ni lo voy a hacer. Y eso me costó mucha discusión ya que dentro de mi comunidad proponían echarlo. Y para mí eso no está bien porque el judaísmo no tiene un código de comportamiento. No soy quien para decir si Timerman es bueno o mal judío. Sí creo que fue un pésimo canciller. Cuento en el libro que él nos confiesa a tres personas que él sabía que lo único que quería Irán era que cayeran las alertas rojas. Está en los expedientes. Él nos llama en abril de 2014. Fue casi un año y medio después de suscripto el memorándum que se firmó el día de la Conmemoración Internacional del Holocausto, (27 de enero de 2013), con un país negacionista del Holocausto que, además, había puesto una bomba en la central judía en la Argentina.

Él nos llama a mí, que era vicepresidente de la DAIA, al presidente y al secretario, y nos dice: “Miren, yo viajo a Israel ahora. Pero cuando vuelva seguramente la Cámara va a fallar por la inconstitucionalidad del memorándum.  Les pido que sean buenos con el Gobierno porque el Gobierno tuvo buena voluntad. Y les pido que esta conversación quede acá hasta que yo vuelva”. Se va en viaje oficial, y cuando vuelve el Gobierno apela la inconstitucionalidad del memorándum dictada por la cámara.

Luego, de manera muy enérgica, él acusa a las instituciones de la comunidad judía. El secretario de la DAIA lo llama y le dice: “Pero vos nos dijiste hace tres semanas que no iban a apelar y nos pedías que los acompañemos”. Timerman contestó: “Me quede sin margen, hablen con Zannini”. ¿Por qué lo hizo? Es una pregunta que tendrá que responderla él. Yo, al igual que los otros dirigentes, nos presentamos ante (el juez federal Claudio) Bonadío y declaramos lo que él nos había dicho. En su caso creo que es como el fanatismo del converso. Y cuando hablo de converso no hablo de religión, sino del fanatismo del que abraza una ideología, que suele ser mucho más fuerte.

La expresidenta Cristina Kirchner y su canciller, Héctor Timerman.

La expresidenta Cristina Kirchner y su canciller, Héctor Timerman.

-¿Puede contar su contacto con el juez Daniel Rafecas?

WW: Nosotros en la DAIA no éramos querellantes en la causa que se abrió a partir de la denuncia de Nisman, en la que acusa de encubrimiento a la expresidente y al excanciller, [entre otros 10 imputados que serán juzgados]. Rafecas nos llama a su despacho el 26 de febrero de 2015, el mismo día que firma la desestimación in límine de la denuncia de Nisman. Ahí nos exhibe dos documentos en los que, según él, Nisman se contradecía respecto a su denuncia.  Después nos dice que la secretaria de Nisman coincidía con él en que el fiscal tenía un problema psiquiátrico. Yo nunca había hablado personalmente con Rafecas, por más que él era un hombre muy vinculado a la comunidad. Lo había visto en algunos eventos sociales, pero no tenía relación con él. Y la verdad es que me fui preocupado, porque yo no era amigo de Nisman y esa era la primera noticia de que alguien cercano a él, como su secretaria, decía tenía un problema psiquiátrico.

El juez Daniel Rafecas desestimó originalmente la denuncia de Nisman

El juez Daniel Rafecas desestimó originalmente la denuncia de Nisman

-Hay otros detalles reveladores en el libro, cuando Rafecas les dice: “¿A cuál de los dos Nisman le creo?” y cuando firma en presencia de ustedes el fallo que desestima esa denuncia…

WW: Bueno, de hecho fue sancionado por el Consejo de la Magistratura por ese hecho que es inédito, por conducta indecorosa y reprochable. Tendría que explicarlo él. Pero aquello fue una muestra de poder. Y habría que aclarar que después la secretaria de Nisman confirmó que esos documentos no se contradecían, negó que ella pensara que Nisman tenía problemas psiquiátricos, y ratificó que no había hablado con Rafecas en el último tiempo. Yo más tarde lo denuncié en la Justicia, porque justamente por aquello lo critiqué en un programa de TV. El me llamó y me amenazó. Esa causa fue cerrada por el juez Casanello en 24 horas, sin llamarme a declarar y sin que el fiscal Delgado apelara, en una muestra de corporativismo judicial. Él sabe que me apretó y de hecho lo reconoció en el testimonio que el dio ante Casanello. “Sí—dice—, yo lo llamé a Wolff, y le hablé en términos ásperos y difíciles”. Fue un apriete.

-¿Creen que se va a saber algún día quién mato a Nisman? ¿Tienen una hipótesis formada?

WW: Yo sí y esto es una opinión, no es un dato: esto es obra de un servicio local. Había muchos interesados en que él no hablase aquel lunes: muchos interesados por el tema del Memorándum, por el tema Irán, para que no se contara qué pasaba con toda la plata negra que movía la SIDE de aquel entonces. ¿Quién fue? El tiempo dirá. Hoy el vaso está medio lleno. Tanto para la familia Nisman, como para las 85 familias que perdieron a un ser querido en la AMIA, o para los parientes de los 29 muertos en el atentado a la embajada de Israel. Todo forma parte de un mismo ciclo de atentados del terrorismo islámico. Pero estuvieron a esto de hacernos creer que la denuncia de Nisman era un mamarracho y hoy hay dos fallos que dicen que su denuncia fue plausible, verosímil y coherente. Y hay otros dos fallos que dicen que esto debe investigarse como un asesinato.  Por eso, hasta que algunos no puedan dejar a un costado esa ideología venenosa que carcome a las instituciones y entender que la figura de un fiscal—459 veces escritas en un libro con mayúscula—, debe ser resaltada, se va a hacer difícil que entre todos podamos construir un país con instituciones más firmes.

Infobae

Opinión

La jueza que condenó a Videla por el robo de bebés: “Justicia es poner paz donde hubo dolor”

Published

on

La exjueza María del Carmen Roqueta aseguró que “justicia es poner paz donde hubo dolor” al recordar la condena a Jorge Rafael Videla por el plan sistemático de apropiación de bebés, en cuya causa intervino como presidenta del Tribunal Oral Federal (TOF) 6 que emitió el veredicto, y sobre aquel fallo histórico subrayó: “Creo que cumplí con mi trabajo”.

En una entrevista con Télam, Roqueta revivió la jornada del 5 de julio de 2012, cuando “en un día muy frío” el Tribunal que presidía leyó la última sentencia contra Videla, a quien condenó -junto a Jorge “el Tigre” Acosta, Reynaldo Bignone, el exmédico policial Jorge Luis Magnacco y otros- por “la práctica sistemática y generalizada de sustracción, retención y ocultamiento de menores de edad”.

Ante un nuevo aniversario del golpe de Estado de 1976, la exmagistrada reveló que al momento de leer el veredicto ella y los otros integrantes del TOF 6 “se sentían muy seguros” luego de haber estado “un año y medio trabajando”, pero confió que ese día al retornar a su casa tras el “tenso momento de la exposición” se encontró con su familia y entonces sí pudo, por fin, “bajar y llorar un poco”.

Roqueta se jubiló del poder judicial en 2017 y dos años después fue distinguida por la Legislatura porteña como personalidad destacada de los Derechos Humanos: se le reconoció su compromiso en la restitución de la identidad de menores apropiados durante la dictadura, a partir de su rol en el juicio por el plan sistemático de robo de bebés, una labor que para la exjueza implicó simplemente “cumplir con el trabajo” aunque al mismo tiempo, asumió, “quedó para la historia”.

Periodista: ¿Cómo vivió el día de la lectura de la sentencia, aquel 5 de julio de 2012?

María Roqueta: Internamente trabajé muchísimo, porque como jueza tenía que responder a la sociedad con un fallo que fuera objetivo. Habíamos logrado organizar bien el trabajo en el tribunal: los empleados y funcionarios del tribunal habían trabajado mucho. Después de las últimas palabras de los imputados, volví a mi despacho y me acuerdo que me saqué los zapatos y dije: “Bueno, ya está”. Pero faltaba ese otro momento, la lectura de la sentencia, en el cual uno, obviamente, como juez o jueza que está en el Tribunal Oral, pone mucho el cuerpo y se expone. Me acuerdo que me calmé. Bajé los niveles. Era difícil. Y leí, con la autoridad que correspondía leer semejante fallo. En definitiva, es lo que siempre digo: la justicia, en un estado de derecho, de alguna manera es poner paz donde hubo dolor.

P.: Fue un momento histórico.

M.R.: Creo que cumplí con mi trabajo. Sé que hay una mirada (de valoración) por haber hecho el juicio (sobre robo de bebés), como ocurre con todos lo que hemos trabajado con las causas de esa humanidad. Que sí, es cierto, quedan en la historia. Pero yo lo quiero tomar como algo cotidiano porque si no sería muy pesado.

P: ¿Cómo llegó a intervenir en la causa del ‘Plan sistemático de robo de bebés’?

M.R.: La causa por robo de bebés venía ya desde el año 1997. Una causa en la que no solo estaba imputado Videla sino varios que militares más. Eran 34 casos en los cuales íbamos desde el caso (Francisco) Madariaga (fallecido en 2020), que había sido apropiado y había aparecido, hasta el caso de (Victoria) Donda, que había sido apropiada. El máximo referente de todo ese plan era Videla y en el medio estaban (Jorge ‘el Tigre’) Acosta, (Jorge Luis) Magnacco, (Antonio) Vañek y mucho más. Teníamos testimonios de chicas embarazadas que habían parido en lugares donde había maternidades clandestinas: Campo de Mayo, el Pozo de Banfield. Había una práctica sistematizada. Pero para poder decir que hubo una sistematización había que analizar varios centros clandestinos: todo el circuito La Plata, el circuito de Campo de Mayo, ESMA. Y así tuve que armar el juicio, primero por cada centro clandestino y en cada centro, cada caso puntual y las testimoniales de la gente que había sobrevivido y contado lo que había visto. Después, con la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, comienza una nueva etapa. Y también con los fallos que saca la Corte Suprema en su momento, después de la anulación (de las leyes) que hace el presidente (Néstor) Kirchner y el Congreso acompaña. La Corte después dicta tres fallos fundamentales, uno a partir del espía chileno (Enrique) Arancibia Clavel, para decir que esas causas no habían prescripto, porque eran delitos de lesa humanidad y, como tales, no prescriben. El delito es tan terrible para la sociedad que eso no puede prescribir. Mi trabajo era trazar toda la línea de responsabilidad penal, como se llama en derecho penal, para llegar a los máximos, a los que dieron las órdenes.

P.: En esa oportunidad la Justicia estuvo a la altura. Así lo vivieron los organismos de DDHH y las propias víctimas. ¿Cómo ve usted ahora los debates sobre la justicia?

M.R.: El poder judicial debe volver a ser confiable. Tiene que haber una justicia ordenada, transparente, creíble y que tenga una mirada amplia de la sociedad, conociendo qué es lo que pasa y dónde se necesita ser efectivo, ágil, llegar a tiempo. Se han vivido y se viven momentos complejos, que no son de la mejor calidad de justicia que se pueda ofrecer, con diez jueces que hacen una instrucción y un juicio que está comprado o lo que sea. Se puede hacer persecución política, como se ha estado haciendo, pero eso no quita que hay un montón de gente que trabaja seriamente y pone todo para hacer las cosas bien.

P.: ¿Cómo decidió ser abogada y cómo entró en el Poder Judicial?

M.R.: Siempre tuve presente durante mi carrera, y en el ejercicio de mi profesión, la búsqueda de ejercer derechos y lograr, un poco, que se haga justicia. Esa fue siempre mi motivación principal en el marco del país que viví -los ’60 y los ’70- en el que, bueno, las injusticias existían. Un país que tenía proscripciones políticas. Yo me críe en un barrio muy sencillo, Valentín Alsina, y mis viejos eran personas de laburo. Por eso sentía la injusticia, pero mis viejos me enseñaron que la educación era una herramienta importante para avanzar en el camino que uno quería armar. Hace poco conversaba con una amiga que siente nostalgia de los ’70, pero los ’70 fueron terribles. Yo viví la etapa más terrible de la facultad de Derecho, con patotas caminando por los pasillos y compañeros y compañeras a los que se llevaban, que habían sido torturados en el decanato, cosas horribles. Uno no entendía muy bien qué era lo que estaba pasando porque creía que se los llevaban detenidos y en algún momento aparecían pero la realidad fue terrible, porque no aparecían nunca más.

P.: ¿Y cómo fue su ingreso al Poder Judicial?

M.R.: Yo me incorporé antes de la reforma del año ’94; uno acercaba su currículum y veía qué podía pasar. Yo venía de la calle, no pertenecía al Poder Judicial. De hecho, las veces anteriores en que había intentado entrar, una vez me discriminaron por ser mujer y otra vez, en la época de los radicales, por peronista; pero sobre todo por ser mujer, porque me interesaba mucho el tema penal. Porque aunque en la facultad de Derecho la mayoría eran mujeres, en determinados cargos es como muy, muy difícil, poder llegar a ser jueza, o ser fiscal, o defensora oficial. En una entrevista, por ejemplo, cuando yo tenía 27 años, el secretario me mira y me dice: “Vos sos joven, y sos mujer, y si tenés que verte con un detenido…” Yo le dije: “Yo soy una profesional preparada y uno elige también qué cosas hacer dentro de la profesión”.

P.: En este año se cumplen 40 años del regreso de la democracia. ¿Cómo vivió aquel momento?

M.R.: Quienes tenemos algunos años y recordamos ese 1983, en el que todo parecía posible con la vuelta a la democracia y había mucha ilusión, después fuimos viendo que no era tan fácil.

P.: ¿Qué opina del fuero federal?

M.R.: La justicia federal necesita, sobre todo, que sea modernizada. Hay que tener recursos y la mejor calidad de personas, pero calidad en el compromiso con la justicia para que no se haga algo contra el estado de derecho. Y hay que poner la mirada en el tema de género, porque el Poder Judicial está un poquito atrasado. No puede haber una Corte con cuatro señores (por Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti). No voy a abrir juicio de valor porque son personas intelectualmente importantes, pero no puede ser una Corte en la cual no haya cuatro mujeres más, o cinco más. Pienso que en algún momento tiene que caerles la ficha y dejar de jorobar.

 

Andrea Holgado para Ambito

canalxfn.com no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

Noticiasxfn.com no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

Caprica.org.ar no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

Continue Reading

Judiciales

No fue lawfare: mentiras y trampas en el juicio de Vialidad que condenó a Cristina

Published

on

Abogados que ocultaron tramos de documentos oficiales en que basaron las defensas porque lo omitido hundía a sus clientes. O que le enrostraron a la Fiscalía haber lanzado afirmaciones que en realidad nunca lanzó para confundir al tribunal o a la opinión pública. O que denunciaron la violación del derecho de defensa por no haber sido notificados sobre la incorporación de una prueba al expediente cuando sí fueron notificados. O varios peritos de parte y testigos que orillaron el falso testimonio con afirmaciones sesgadas. O empleados de Vialidad que… la lista continúa.

El Tribunal Oral Federal que condenó a la vicepresidenta Cristina Kirchner en la “causa Vialidad” reflejó en el fallo que difundió este jueves múltiples episodios en los que las defensas intentaron jugadas, como mínimo, polémicas. Tanto, que el tribunal le notificó lo ocurrido al Colegio Público de Abogados de la Capital Federal para que “fiscalice las temerarias intervenciones profesionales” y, acaso, aplique sanciones disciplinarias.

Esas “temerarias intervenciones” de los abogados reflejaron un contraste notorio entre las acusaciones de lawfare y lo que salió a la luz, con evidencias concretas, durante las audiencias del juicio oral, según surge de la sentencia de 1616 páginas que rubricaron los magistrados Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso.

De hecho, el tribunal remarcó a lo largo del fallo que algunas defensas incurrieron repetidas veces en una “actitud estratégica de elegir los presupuestos de la acusación para luego poder defenderse de dichos extremos inexistentes”, lo que calificó como “una verdadera y despiadada lucha contra los molinos de viento”. ¿Por qué? Porque para algunas defensas, según el estimó el tribunal, lo más importante no se dirimía en las audiencias del juicio, sino en “la instalación de una narrativa en el plano extraprocesal”. Es decir, la difusión de un relato ante la opinión pública a través de los medios de comunicación y propaganda afines.

La lectura del fallo aporta numerosos ejemplos. Entre ellos, cuando los defensores de Cristina Kirchner, Carlos Beraldi y Ary Llernovoy, remarcaron que no había mensajes directos entre la entonces Presidenta y su secretario de Obras Públicas, José López, y esgrimieron esa ausencia como una prueba irrefutable de la inocencia de su defendida. “¿Esperaban que la Presidenta de la Nación chateara personalmente con López?”, se preguntó el tribunal. “¿Quién más que la entonces Presidenta, a través de su asistente personal, podría ordenarle a un Secretario de Estado que se hiciese presente en la quinta de Olivos o en Casa de Gobierno a una hora determinada?”, plantearon Gorini, Giménez Uriburu y Basso, para luego indicar que esa jugada defensiva era “realmente llamativa” y “manifiestamente endeble”.

El letrado de Lázaro Báez, Juan Martín Villanueva, fue, sin embargo, el que protagonizó más episodios cuestionablesc como cuando sostuvo que su cliente había sido un empleado bancario que ascendió en el escalafón hasta convertirse en el máximo ejecutivo del Banco de Santa Cruz, y le enrostró al fiscal Diego Luciani haber dicho que era mero “cajero” bancario.

Pero eso era falso. Luciani jamás lo dijo, aclaró el tribunal. “Si alguien utilizó ese término fue la propia defensa de Báez, la que puso ese concepto en boca de los Fiscales para luego poder cuestionarlo y probar un pretenso yerro tanto en el plano procesal como en el mediático”. Y más allá de eso, el tribunal le recordó que lo esencial del debate pasó por otro lado: ¿tenía Báez experiencia en la obra pública? Y allí tropezó su defensa: “El intento de la defensa técnica de Báez de presentarlo como un avezado directivo de una empresa constructora es directamente una farsa”, concluyeron los magistrados. Una y otra vez, empero, Báez y sus letrados incurrieron en “falsedades” o “falacias”, según el tribunal. Por ejemplo, cuando quisieron sostener que Austral Construcciones se constituyó en abril de 2003 y acusaron a los fiscales de “falsear” el acta constitutiva porque “no les servía la verdad”, lo que también levantó y difundió la maquinaria de difusión cercana al kirchnerismo. Pero en realidad, según verificó el tribunal, la Fiscalía tenía la razón, apoyado en un documento que así lo demostró y que conocían todas las partes. “Nos enfrentamos, una vez más, frente a un artilugio defensista cimentado en una nueva falsedad”, estimó el tribunal.

La diferencia entre el relato y las evidencias también quedó expuesta cuando se analizó cómo fue el proceso de recálculo en las obras otorgadas a Báez. La defensa invocó un informe que aportó la Dirección Nacional de Vialidad que calificó como “una prueba central” que demostraba “dos mentiras” de la Fiscalía y cuya solidez era “incontrovertible”. Pero, ¿qué pasó? Según el tribunal, la defensa incurrió en un “berenjenal comparativo” que lo llevó a esbozar conclusiones erróneas o, peor, “opuestas” a las reales.

“La treta”

Lo mismo, aclaró el tribunal, ocurrió cuando se analizaron la ampliación del plazo o las redeterminaciones de precios en las obras, entre otros ejes. “Una vez más, las defensas escogieron ellas mismas los ejes sobre los que ejercer su defensa, y en ese afán realizaron estruendosas y simbióticas alegaciones sobre la licitud del procedimiento, el acierto en los cálculos y el sacrificio económico que resultaba su aplicación para las empresas”, destacaron los magistrados, cuando en realidad lo nuclear pasaba por otro lado. “El yerro en el que caen las defensas […] se encuentra íntimamente vinculado al escandaloso sistema de aprobación de las ampliaciones de plazos y modificaciones de obras (por su automaticidad, inmotivación, falta de acreditación, justificación, control y fundamento, etc.) que lo antecedió, pues ahí residía la treta”.

Lejos de amilanarse, sin embargo, las defensas redoblaron la apuesta. También buscaron relativizar la importancia de que Báez tuviera tanta preponderancia en el reparto de la obra pública en Santa Cruz. Para eso plantearon que en cada provincia suele haber una constructora con mayor peso porque, por ejemplo, está localizada allí, con sus maquinarias y personal, lo que buscó probar el letrado de Báez con un documento que, según alertó el tribunal, “no cuenta con la totalidad del universo de obras financiadas y/o ejecutadas por la Dirección Nacional de Vialidad en el período en cuestión”.

El tribunal requirió entonces más información oficial y lo que obtuvo, lejos de beneficiar a los acusados, los complicó aún más. “La comparación completa y fundamentada en datos es apabullante”, destacaron Gorini, Giménez Uriburu y Basso, que se apoyaron en datos “objetivos y verificables” para evaluar la distribución de sus negocios, y deploraron lo que calificaron como “pseudos conocimientos especiales” que invocaron los letrados y que fueron levantados por los medios de comunicación más afines al Frente de Todos.

Testigos y peritos de parte

En otros tramos de la sentencia, el tribunal también criticó la actuación de varios testigos y peritos propuestos por las defensas. Entre ellas, una ingeniera designada como perito por la defensa de la actual vicepresidenta, Adriana Alperovich, quien para apoyar a quien la había contratado llegó a utilizar “bibliografía estudiantil guatemalteca, peruana y colombiana, sin precisar sus antecedentes, calificación y rigurosidad técnica”. Eran tesis de grado.

Eso no fue todo. “Sobrepasando los límites de la tarea pericial que le fuera encomendada”, Alperovich “omitió deliberadamente su abordaje completo y recurrió a normas, dictámenes y antecedentes que no resultan ni remotamente aplicables al caso”, indicó el tribunal, hasta ofrecer “una versión exculpatoria que no resiste el menor análisis técnico”. Pero su relevancia en los tribunales fue lo de menos. Su testimonio fue ensalzado por la defensa y levantado por los medios de comunicación afines como “la única que hizo un estudio serio” y “quien de manera fundada descartó la acusación de sobreprecio. En la misma línea, varios testigos quedaron bajo la lupa, como Daniel Semino o Laura Hindie, que durante el juicio intentó relativizar lo que ella misma, como jefa de Legales del Distrito 23° de Vialidad, había sostenido apenas nueve meses después de ocurridos los hechos. ¿Qué pasó en el medio? Que asumió como diputada por el Frente de Todos. Para el tribunal, su giro resultó una “calculada y casi frívola mutación” que la llevó a modificar “su percepción de los hechos de manera infantil y con un sentido de la oportunidad asombroso”. Pero en las usinas de propaganda fue presentada como “una testigo fundamental”.

Como el de Hindie, los defensores y medios afines al kirchnerismo también propalaron el testimonio de Justo Pastor Romero, un auditor de Vialidad Nacional que al declarar durante el juicio oral “escondió en su fundamentación un error de base” conceptual, según el tribunal, y lanzó “temerarias interpretaciones” sobre un informe, “totalmente opuestas a las aclaraciones que realizaron sus hacedores en relación a sus alcances”. Y otra vez se repitió la dinámica: los magistrados desconfiaron de su credibilidad, al punto de indicar que les pareció que estaba “constantemente repitiendo un libreto”. ¿Y los medios de propaganda oficialistas? Lo definieron como “otro testigo demoledor”.

Columnas y notificaciones

Sin embargo, el tribunal estimó que no sólo ciertos testigos parecieron seguir un libreto propio. También la defensa de Báez editó el contenido de los “reporte por certificación de obra” que expuso durante el juicio. “Para empezar, [el material] se trata de una muestra parcializada del informe en cuestión”, alertaron los magistrados, que lo compararon con el informe completo. “Como puede verse de una simple comparación, 6 columnas han sido suprimidas del documento en ciernes”.

Pero si el uso de información parcial o manipulada durante un juicio resulta cuestionable, casi todas las defensas incurrieron en otro error, decisivo en el resultado final del proceso. Ocurrió cuando se incorporó a la “causa Vialidad” evidencias de otra investigación, la 12.441/2008. Es decir, el contenido de los teléfonos de José López; en particular, los mensajes que el exsecretario de Obras Públicas cruzó con los secretarios privados de Cristina Kirchner, Máximo Kirchner, Báez y su alfil en Austral Construcciones, Julio Mendoza.

La tormenta se desató cuando el fiscal Luciani usó esos mensajes en su alegato de manera intensiva. Las defensas clamaron que se violaba el principio de defensa en juicio de sus clientes y que jamás habían sido notificados sobre el eventual uso de ese material, lo que amplificaron sus canales habituales de difusión y propaganda, donde se afirmó que era “una prueba introducida silenciosamente en el juicio”, sin que las partes pudieran objetar su inclusión.

La realidad fue, otra vez, distinta. Así lo expuso el tribunal en su sentencia: “Las alegaciones introducidas por algunas defensas en torno a la supuesta sorpresa que habría significado para esas partes el hecho de conocer el contenido de esa prueba recién durante el alegato de clausura fiscal resultan completamente inadmisible”. ¿Por qué? Porque la Fiscalía pidió incorporar ese material al expediente mucho antes del inicio del juicio, todas las partes fueron notificadas de su interés e invitadas a compulsar ese material, que quedó a disposición de todos desde noviembre de 2017, tanto en la sede del tribunal como en forma digital.

Dicho de otro modo: las defensas sí fueron notificadas sobre el eventual uso de los teléfonos de López como prueba, pero no reaccionaron. Para el tribunal, la conclusión es tan clara como tajante: “Independientemente de si se trató de una decisión deliberada o una negligencia en el ejercicio del ministerio de la defensa, lo que de ninguna manera puede permitirse es atribuir ni vincular esa supuesta sorpresa con el comportamiento procesal que ha tenido este tribunal”.

 

 

Hugo Alconada Mon para La Nacion

canalxfn.com no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

Noticiasxfn.com no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

Caprica.org.ar no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

 

 

 

 

 

 

 

Continue Reading

Opinión

Langostino: mediar entre la sobreabundancia, la especulación y la impaciencia

Published

on

En Chubut la zafra de langostino en aguas provinciales sumaba 95 mil toneladas por estos días y va camino a superar las 100 mil toneladas cuando termine.

La flota amarilla de Rawson, costeros y artesanales, resisten las presiones del resto de las cámaras, lease CAPECA y CAPIP, para mantener abierta una pesquería que sigue mostrando una abundancia extraordinaria. El miércoles hubo barcos que completaron 1100 cajones en el día.

La 2023 es la zafra de la cola. A partir del contexto complejo, con un mercado internacional que no demanda langostino entero y las cámaras frigoríficas con mucho stock de las capturas de la flota tangonera congeladora en aguas nacionales 2022, todo marisco que se descargó en Rawson terminó hecho cola.

La super abundancia provocó que empresas como Iberconsa se salieran de todo cálculo. Supongamos, si pensaban producir no más de 5 mil toneladas para toda la zafra, al primer día de febrero ya habían superado las 5200 toneladas.

A partir de entonces Iberconsa ya no hace más cola sino langostino entero que siguió coleccionado en cámara. Mientras tanto en Mar del Plata sus 100 trabajadores hace casi un mes que no son convocados a trabajar por la demanda de los peladores por la caída en la producción de cola pelada y desvenada a partir de la incapacidad de la empresa para sostener el volumen del congelado. La única oferta por ahora es retiros voluntarios para todos.

Lo que le pasó a Iberconsa le ha pasado a muchas otras empresas. Eso generó que algunas partidas de langostino entero lleguen a Mar del Plata, algo que está expresamente prohibido en la legislación chubutense pero el romance multisectorial que genera el empacho con el oro naranja todo lo permite.

“Seguimos una semanita más y cortamos”, prometen los pescadores amarillos cuando desde los frigoríficos les marcan la imposibilidad de seguir recibiendo matera prima. Ya no solo por falta de espacio en cámara sino de personal. Se va cumpliendo el tiempo de la temporalidad en la contratación y no queda más que bajar la persiana.

Estos días respiran aliviados en Playa Unión porque Gabriel Aguilar se fue al exterior y hasta que no regrese no firmará el cierre de la temporada como vienen pidiendo, por distintas vías e interlocutores, los demás sectores.

El contexto de lo que se vive en Rawson sirve para graficar la pelea que se vive por estos días en la pesca atada al langostino.

La apertura de un área para pescar el marisco sobre el 41ªS, al norte de la zona de veda de merluza para la flota tangonera congeladora y fresquera de altura, divide las aguas.

La flota congeladora patagónica no quiere saber nada con esa posibilidad. Sostienen que un mayor volumen empujará los precios hacia abajo. Tanto del entero como de la cola, que a partir de la abundancia de Rawson, tuvo una mayor presencia en los mercados internacionales.

Igual la estadística que difunde CAPECA no refleja la pérdida de valor de la cola. En enero se exportaron 6228 toneladas a un valor promedio de 7592 dólares la tonelada. Los números representaron 22% más en volumen y la caída del 3,6% en el precio promedio en la comparación interanual.

En Mar del Plata la postura es inversa. CEPA y CaIPA han pedido abrir el área para poder pescar, acompañado de algunos gremios como SIMAPE, SUPA y la Asociación de Capitanes. Siempre se habilitó en abril pero pidieron la apertura anticipada la primera semana de marzo. Aseguran que más allá del contexto crítico que hoy tiene el mercado, si hay langostino en el agua quieren pescarlo.

Y este sector no pesca desde octubre del año pasado cuando terminó la zafra de aguas nacionales y se prohibió el despacho a la pesca para preservar el ciclo reproductivo de la especie. A diferencia de sectores que se oponen a la apertura del Norte, pero tuvieron/tienen participación en la zafra de Chubut, ya sea como pescadores y/o reprocesadores.

“No nos oponemos, solo queremos que haya consenso para habilitar el 15 de abril”, asegura un industrial con barcos tangoneros congeladores.

¿Cuánto langostino se declara capturar al norte, entre enero y mayo, como para que baje mucho más el precio, haga tambalear la sustentabilidad del negocio y ponga en riesgo la estructura de las propias empresas?

De acuerdo a las cifras de los últimos años, en 2019 se registraron las mayores capturas con 19300 toneladas. Al año siguiente fueron 10.100 y en 2022 sumaron 16.500. El volumen incluye la pesca específica como el by catch del 20% de principios de año cuando los fresqueros pescan merluza.

Son cifras que no parecieran generar las graves consecuencias que advierten quienes desean que el área se mantenga cerrada, no al menos mayores al impacto que representa el desembarque de 100 mil toneladas en cuatro meses de zafra provincial.

Mar del Plata registra uno de los peores inicios de año en lo que a desembarques pesqueros se refiere. Los datos oficiales marcan una caída general del 16% hasta el pasado 7 de marzo. Con reducción del 12% en los desembarques de merluza hubbsi del efectivo sur y 37% de calamar.

Más allá de los intentos y presiones para que se deje de pescar en Chubut y no se abra al norte de manera prematura, en Pesca llevaron tranquilidad a los referentes sindicales de Mar del Plata que fueron a ver al Subsecretario preocupados por la falta de actividad en el puerto.

“No hay razones reales como para temer un escenario de no apertura”, les dijo Liberman, según refleja el portal Pescare. “Todos estos años hemos habilitado la pesca del langostino en el norte en abril”, reveló el funcionario.

Esta semana el CFP rechazó el pedido anticipado de apertura formulado por las cámaras marplatenses al considerarlo “prematuro” y convocó a la Comisión de Seguimiento de Langostino para los próximos días. La duda por estas playas es si el 15 de abril abre para todos o recién arranca la prospección.

Más tarde que temprano como piden en Mar del Plata se habilitará el sector norte de aguas nacionales. Veremos cuántas son las empresas de CAPECA y CAPIP que deciden mantener los tangoneros congeladores amarrados a muelle.

Mientras tanto varios de sus socios siguen alimentando stock con el langostino de provincia, Esa materia prima no parece implicar ninguna amenaza al futuro del negocio. Sobre todo porque es la de ellos.

 

Roberto Garrone para Punto Noticias

Imagen @ramiro32_

canalxfn.com no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

Noticiasxfn.com no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

Caprica.org.ar no se hace responsable del contenido de los artículos generados por terceros.

 

Continue Reading

Más Vistas